Dicen que segundas partes nunca fueron buenas y, sobre este tema me gustaría reflexionar hoy. Después del "Terror Blanquero" que apareció allá por mayo, en el que se comenzaron a cerrar tiendas y despedir a personal de forma alarmante (y me consta que no con buenas formas, lo sé porque por desgracia esto afectó a mucha gente que conozco y aprecio) creo que en este momento la "renovada" SuiteBlanco, está viviendo su segunda oportunidad.

Personalmente, Blanco (me cuesta llamarlo de la otra forma) ha pasado de ser MI TIENDA de cabecera, la número uno, la que miraba la web casi cada día, a ser un cero a la izquierda. No entiendo como he pasado de un extremo al otro, pero es así.

Sus colecciones pasaron de ser muy punteras, era la tienda donde encontrabas las prendas más diferentes, a ser una especie de "hermana pequeña de Zara" pero no en plan bien, si no más bien la típica adolescente que sale en "hermano mayor" que ni encuentra su sitio, ni hace las cosas bien.

Si pretendes dejar tu línea de toda la vida para ser "la nueva Zara" hazlo de forma que atraigas al público. Ofrecer lo mismo producto con peor calidad (aunque Zara no es la créme de la créme de la calidad) y a precios iguales, no creo que sea la estrategia más adecuada, no hace falta ser un experto en Márketing para ver eso. De hecho, a la vista están los resultados.

Parece ser que sigue por la misma línea y que lo único que ha cambiado es que ahora hay menos tiendas. En Vitoria han cerrado las dos que había y por lo tanto estoy bastante "Out" de su colección, pero simplemente con echar un vistazo a su página web, ya se aprecia que el cambio es mínimo. De hecho, hay poquísima ropa, cosa que antes no pasaba y, lo poco que me gusta, no me atrevo a pedirlo on-line porque si algo he aprendido de Blanco es que la prenda virtual y la real, por norma general, se suelen parecer como un huevo a una castaña.

Os puedo garantizar que me da verdadera pena, sobre todo ahora que lleva el invierno y rescato abrigos de "los tiempos buenos" de Blanco donde calidad- diseño- precio eran un 3x1.