Como ya comentaba el martes, el sábado a última hora salió el sol, afortunada de mí, el domingo por la mañana volvió a salir y, aprovechando que íbamos a comer fuera, decidimos hacer unas fotos. Evidentemente, es Vitoria y, para las seis de la tarde, volvió el invierno ¡Ni que lo echáramos de menos!.

Por primera vez en la historia de mis estilismos, todo es de esta temporada. Alguna vez ya he comentado que soy muy de reciclar, básicamente por espacio y por economía, que no ando muy boyante ahora mismo, aunque de vez en cuando, me doy mis caprichos. 

Por otra parte, no entiendo qué me pasa a mí o qué les pasa a las colecciones esta temporada que me gustan muy poquitas cosas, nada que ver con lo loca que me volvía con los trapitos veranos anteriores. Supongo que el hecho de no estar en Madrid y no ver tantas tiendas, sumado al clima invernal que se ha apoderado de la ciudad, son las principales causas de mi "apatía modil". Espero que mi próximo viaje madrileño de sus frutos.

Sin liarme más, todo es de Blanco a excepción de las sandalias que son archifamosísimas en la blogsfera y de las que ya os hablé aquí, cuando os enseñaba los clones de Zara. Sigo exactamente igual de blanca o más que las anteriores veces porque, repito, aquí no hay verano ¡qué horror!

Ya no queda nada para el fin de semana, y ya veo las vacaciones más cerca. Feliz Jueves.